Ahora que llegan las altas temperaturas es fundamental saber cómo conservar el jamón y todos los productos ibéricos para así poder degustarlos durante más tiempo y con la misma calidad.
Para disfrutar al máximo de todo el sabor y textura de nuestro jamón es imprescindible una buena conservación. Normalmente los productos ibéricos no suelen tener fecha de caducidad pero, es recomendable su consumición en un periodo corto una vez empezado el producto. Te contamos todos los consejos para esta conservación. ¡Continúa leyendo!
Temperatura ideal para la conserva
Si buscas conservar tu jamón o embutidos a largo plazo, lo ideal es hacerlo en un lugar fresco, seco y con su envase original, ubicado lejos del sol.
Alrededor de entre unos 10 y 15 grados centígrados sería la temperatura idónea. Por el contrario, si se pretende consumir en un plazo inferior a un mes, se recomienda conservarlo a una temperatura de 25 grados.
Evita que tu jamón se reseque
Para evitar que nuestro jamón no pierda la humedad, une las lonchas de grasa en la superficie del corte para crear como una “segunda piel” y seguido, recubrir con film de cocina transparente para impedir así que el aire pueda acelerar el proceso de resecado.
Consumición al momento
Para evitar la pérdida del sabor y el aroma del producto es fundamental evitar dejarlo a la intemperie durante un prolongado tiempo, por lo que se recomienda consumir el producto al momento nada más ser cortado.
Ahora ya conoces cómo conservar los jamones ibéricos para mantener su máximo sabor, puedes utilizar estos consejos para cualquier tipo de embutido ibérico para que su conservación sea adecuada y se disfrute de la mejor calidad.
Sigue estos consejos para degustar al máximo de tus jamones ibéricos. En Jamones Nicolás tenemos los mejores productos para tu cocina de una excelente calidad.
